
La tolerancia, el respeto a la diversidad, son evidentes muestras de personas evolucionadas, más conscientes, verdaderamente comprometidas con ellas mismas y con los demás, e incondicionalmente libres.
Hoy es fácil apreciar en nuestros días, una especie de culto a la no tolerancia, a considerar a quien piensa distinto un enemigo, alguien sin derecho alguno para pensar ni actuar de determinada manera, simplemente por hacerlo de manera distinta, diferente, desde otra óptica, con otra interpretación.
Y quien así opera, quien vive atrapado en su propia realidad sin considerar la posible existencia de otras tan valiosas como la propia, termina quedando enredado en las telarañas de ser lo que piensa, y seguramente sin saberlo pierde su propia libertad.
Es quedarse atrapado en su laberinto de dogmas sin posibilidad de discutirlos, donde se pierde el libre albedrio de pensar como se piensa y respetar ideas distintas reconociendo al otro como legítimo tal.
La falta de tolerancia nos acerca peligrosamente al abismo de la no legitimación de la existencia de otro, con todo lo que eso presupone y que la historia nos presente en mil ejemplos.
Salud entonces a los tolerantes, a los capaces de reconocerse como las personas que son y que piensan, pero sin identificarse con lo que piensan, permitiendo de esa manera que otros con ideas distintas puedan ocupas similares espacios y crecer y desarrollarse desde la diversidad.
Salud a los libres de verdad.
Gracias Carlos por esta mirada diferente de la libertad, la de no estar enganchados ni siquiera a nuestras versiones presentes.
ResponderEliminarCreyendo que en cada momento somos más que el instante anterior.
La vida nos atraviesa constantemente, y que elijamos como pensar y actuar requiere de libertad, y la tolerancia es una de las llaves de acceso.
Ulises
ESTE TEXTO ME LO ENVIO ALDO PEREYRA
ResponderEliminarTolerancia- flexibilidad, flexibilidad-tolerancia.
Conceptos que siento muy unidos. El Pensamiento nos produce un Estado Interno que deriva inexorablemente en un Comportamiento.
Pero como no somos lo que pensamos y sí podemos ser aquello que surja de nuestro pensamiento mucho más evolucionado, podríamos inferir que si nuestro pensamiento se nutre de flexibilidad y tolerancia, de aceptación e incertidumbre puede así evolucionar, crecer, mejorar, corregir y así pues nuestro Estado Interno también cambiará y por tanto lo hará también nuestro Comportamiento. Probablemente este proceso nos posibilite un sentimiento agradable de Libertad, tanto más grande cuanto más flexible, tolerante y sereno sea nuestro pensamiento.
Si pudiésemos recordar todo el tiempo que de quien piensa distinto (sea como sea que piense) seguramente aprenderemos algo, nos sería muy fácil considerarlo simplemente distinto y no enemigo ó rival.
No es fácil pero estoy seguro que tiene sentido el esfuerzo.
Qué lindo poder pensar y sentir sin sonrojarme ni alterarme, que puedo no estar en lo cierto.
Abrazo. Muy lindo espacio.
Aldo
ESTE TEXTO ME LO ENVIO BETINA BLANCO
ResponderEliminarCarlos
Te agradezco que hayas compartido conmigo tu reflexion acerca de la Tolerancia frente a los distinto o diferente, sobre todo en estos momentos que estamos viviendo , especialmente los argentinos; en donde opinar distinto pareciera que te hace objeto de descalificación.
La intolerancia de los "otros" en general me produce una sensación de mucha impotencia, porque frente a la descalificación o desconfirmacion de quien es intolerante, se traba toda posibilidad de dialálogo o de posible entendimiento con el otro, por mínimos que puedean ser los puntos de encuentro.
En general en la vida pude crecer a partir del desafío de sentir cuestionados mis propios puntos de vista . La realidad es tan rica y tan compleja al mismo tiempo como para abordarla desde una sola perspectiva , que ya no me da miedo reconocer que soy bastante ecléctica en cuanto a mis creencias. Y esto no quita que sea fiel a mis principios.
Además comparto plenamente tu consideración que vincula la "aceptacion de los distinto" con la Libertad propia y la que podemos reconocer y aceptar en los otros.
Muy bueno tu escrito, gracias de nuevo por compartirlo
un beso y buen fin de semana
Betina